Biblia

La Biblia es un colección de textos sobre la Revelación de Dios, conocida también como las Sagradas Escrituras.

Esta fue escrita durante el transcurso de miles de años por muchas diferentes personas. Se divide en dos “testamentos” o “alianzas”. Los dos testamentos son el Antiguo y el Nuevo; cada uno tiene sus propios escritos. Como libro, la Biblia contiene muchos diferentes tipos de escrituras: ley, profecía, historia, poesía, narraciones, aforismos, oraciones, cartas y visiones simbólicas.


El Antiguo Testamento

Los escritos del Antiguo Testamento comienzan con los Cinco Libros de la Ley. También llamado Pentateuco (significa Cinco Libros) o Torah (significa la Ley), se los refiere como los Libros de Moisés, ya que se centran en el Éxodo y las Leyes Mosaicas.

En el Antiguo Testamento también se encuentran libros acerca de la historia del Pueblo de Israel, como por ejemplo I y II Reyes y I y II Samuel; los libros Sapienciales o de Sabiduría, como los Salmos, Proverbios y Job; y libros de profecías que llevan los nombres de los profetas del Antiguo Testamento. Un profeta es alguien que profesa públicamente la Palabra de Dios por inspiración divina directa. Generalmente muchas personas piensan que un profeta es alguien que predice el futuro, pero esto es solamente su significado secundario.

La Iglesia Ortodoxa cuenta entre los libros auténticos del Antiguo Testamento los libros que se llaman Deuterocanónicos, aunque por falta de conocimiento varios cristianos colocan estos libros en segundo lugar o los rechazan completamente (por no considerarlos inspirados).


El Nuevo Testamento

El corazón del Nuevo Testamento está conformado por los cuatro Evangelios: el de Mateo, de Marcos, de Lucas y de Juan, quienes se llaman los Evangelistas. La palabra Evangelio proviene del Griego, -Evangelion- y, que significa “Buena Nueva”.

También contiene el Libro de los Hechos de los Apóstoles, escrito por San Lucas. Además encontramos catorce Epístolas (que simplemente significa “cartas”) atribuidas al Apóstol San Pablo. No obstante, es posible que algunas, como la Epístola a los Hebreos, no fueran escritas directamente por él. También se encuentran en el Nuevo Testamento tres epístolas escritas por el Apóstol Juan; dos por el Apóstol Pedro; una atribuida al Apóstol Santiago y otra al Apóstol Tadeo (Judas). Finalmente se encuentra el Libros de la Revelación, que también se conoce como el Apocalipsis, atribuido a San Juan.

Para el Cristiano Ortodoxo, la Biblia es la principal fuente escrita de la Doctrina Divina, ya que Dios Mismo inspiró su escritura por su Santo Espíritu (II Timoteo 3:16; II Pedro 1:20). Esta es la doctrina de la inspiración de la Biblia; es decir, que hombres inspirados por Dios escribieron las palabras que son verdaderamente sus propios palabras humanas (toda palabra es humana), pero que sin embargo se puedan llamar, en su conjunto, la Palabra de Dios. Así la Biblia es la Palabra de Dios en forma escrita pues contiene no solamente los pensamientos y experiencias de los hombres, sino la Revelación de Dios Mismo.

El centro de la Biblia, es la persona del Verbo Viviente de Dios bajo el aspecto de hombre, Jesucristo. Todas las partes de la Biblia se interpretan en la Iglesia Ortodoxa a la luz de Cristo, pues todo lo que está en la Biblia conduce a Cristo y habla acerca de Él (Lucas 24:44). Se simboliza esto en la Iglesia Ortodoxa por el hecho de que solamente el Libro de los Cuatro Evangelios se encuentra entronizado en el Altar, y no la Biblia entera. Esto es así porque todo lo que está en la Biblia se cumple en Cristo.